Un error feliz

Hoy me compré un vestidillo. Nada muy especial, un vestido que me gustó por su rareza y originalidad, un tipo de vestimenta muy inusual en mí. Me lo probé y me gustó, a pesar de un bultito extraño que se hacía en un pliegue. Le pedí a la vendedora que me lo cambiara, porque el que me había medido tenía un tirante medio roto. Tomó el vestido del maniquí, lo cobró, lo puso en una bolsa y nos fuimos. Hace unos minutos saqué de la bolsa el vestido y descubrí con horror que en lugar de ser mi talla, la que me había probado en la tienda, era una talla más grande. Decidí darle una oportunidad; acabo de medírmelo y qué creen: me queda mejor. Y no hay pliegue raro ni bultito. No sé si lo hizo a propósito (¿quién quiere que le digan que necesita una talla más grande?) o fue un error feliz, pero la cosa es que el vestido luce mucho mejor :)

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