Habibi

Mi primer (y único) contacto con Craig Thompson fue Blankets, hace muchos años y muchos recuerdos. Me lo regalaron con una linda dedicatoria y una anécdota que requiere de dos o tres cervezas para poder ser narrada. El asunto es que Blankets me fascinó -¿cómo podría no hacerlo una novela cuyos nombres de capítulos remiten a canciones de The cure?-, me conmovió hasta las lágrimas. Sé que no sólo a mi.
Si bien el asunto con la imagen y las palabras, tanto en una novela gráfica como en un cómic, es que se unan para contar una historia, Thompson logra ese “ir más allá” en Habibi, convirtiendo a las imágenes en poesía que a su vez, narra. No soy ninguna experta en novelas gráficas, pero no recuerdo otra que me haya mantenido sosteniendo la página, viendo una ilustración por minutos y minutos sin pensar siquiera en lo prolijo del trazo o lo avanzado de la técnica, sino absorbiendo la totalidad, entendiendo las palabras que no han sido dichas pero que ahí están, que fluyen con el dibujo y la hermosa caligrafía.
Dicen los que saben que Thompson hizo su tarea al estudiar la caligrafía árabe, su historia y religión. Yo no lo sé (y habrá que preguntarle a Dulcísima luego), pero el trabajo me parece primoroso, excelso. Se los digo yo que disfruto la escritura, y qué mejor escritura que aquella que se dibuja, que encierra sentidos en su figura que luego se convertirán en palabras. Además se pueden ver claramente los 6 años de trabajo que le tomó crear esta historia en la forma en cómo construye la trama, todo el trasfondo religioso e histórico y la gran cantidad de referencias.
La historia es grotesca, sí, es difícil sentirse relacionado con ella, pero yo creo que el autor logra colocarla en el lector y hacerlo partícipe de ella. Está llena de clichés, seguro, de gringadas, de concepciones occidentales y de esterotipos. Pero yo creo, en mi ingenua y personal opinión, que eso no la hace menos bella.
En conclusión, es un libro que vale mucho mucho la pena leer, aunque sea tremendo bloque (que quizá puede usarse luego para descalabrar a algún cristiano -no pun intended-) e incluso si no tienen experiencia previa leyendo novelas gráficas.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *