faringitis itis itis

Tooooodos los trinches años, a la misma hora y en el mismo canal. En realidad sólo dos veces: la primera en febrero/marzo, la segunda en septiembre/octubre. Faringitis. Desde hace ya tantísimos años, que no puedo recordar. Dos veces al año, dos. Esta vez ha sido la segunda: empezó el domingo en la noche y hoy tuve que ir al médico. Fui al de siempre, pero ahora me atendió su hijo, el chico que estuvo en la secundaria conmigo y es dos años menor que yo. Weird. Que me habla de usted y adopta toda la pose de doctor culto y sabelotodo… la verdad le salió muy chido, pero sí fue un poco raro. A ver, respire profundo. Abra la boca por favor. Voy a revisarle la temperatura. El nerviecito al colocar el estetoscopio. Mmmh. Me acordé de un amigo que está estudiando medicina (aunque a él sí le queda la imagen de doctor pervertido, pero claro) y pensé que sería harto divertido ir a consulta con él. Algún día.

Luego ir a comprar las medicinas a walmart. Wow. Descubrí que los hombres guapos y solitarios van a hacer el súper a esas horas. Me cae que el supermercado es un buen lugar para ir a ligar: un hombre que vaya a comprar sus alimentos, jabones etcétera, es sinónimo de responsabilidad y madurez. O al menos es lindo pensar eso. De pronto recordé la frase que dice alguien en la película de Kate & Leopold: “Si un hombre lava un plato y nadie lo ve… ¿realmente lo hizo?”. Mi hermana y yo nos reímos HORAS.

Pero sí, ya he hablado en otro lugar y en otro tiempo sobre lo interesante que es el supermercado, especialmente en horas poco comunes de visita. Por ahora, medicina que me duele mucho la garganta y ¡final de temporada de Medium! Decidí que gastaré mi insomnio en algo más productivo que dar vueltas en la cama, y sola. Ush.