I could wait a million years

Hace mucho que no me ponía a escuchar a Human Drama. Ocurre que hay ciertas bandas que escucho en ciertos momentos de mi vida, por lo que luego de mucho no escucharlas, al tocarlas de nuevo me remiten automáticamente a esa etapa o sensación. Hoy me levanté rara, chipil como mi gato (se estuvo quietecito dejándose acariciar mientras desayunaba mis chococrispis) y como la lluvia que no se decide a caer. El piantado se fue de la ciudad y yo tengo mi guardia de fin de semana, lo que se traduce a trabajar 20 horas el fin de semana.
Hoy es un poco diferente, ocurre que es mi última guardia, es el último fin de semana que tendré que trabajar aquí. El sueño de casi dos años terminará pronto (al fin de este mes, para ser exactos), y nuevamente mi carrera profesional enfrenta una graaan interrogante: ¿y ahora qué? Ciertamente necesito un trabajo, pero por lo pronto nadie sabe nada, no sé cuándo me pagarán mi último sueldo, y aunque lo supiera, ¿sabría hacia dónde ir, sabría qué buscar? Me juré no regresar jamás a la escuela de donde me corrieron por razones cuestionables e informaciones falsas, y lo sostengo: jamás volveré a ese infierno de la intolerancia. Por otra parte no sé si regresar a dar clases sea verdaderamente mi primera opción, yo creo que es la última más bien. Y bueno, partiendo de eso todo lo que se alcanza a ver son preguntas, posibilidades más o menos posibles, pero nada concreto. Supongo que es cuestión de esperar, de que el tiempo decida algunas de esas cosas y yo tome decisiones sobre la marcha, dependiendo de cómo se presenten las cosas. Es lo que me molesta de esas etapas de cambios: nada se define hasta que se define. Y mientras, el océano de posibilidades (como el banco del atlántico, jajaja me acordé). ¿Alguien me ofrece chamba? :)

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *