Pero a veces la noche no es remolino ni vértigo de deseos que se persiguen unos a otros, sino abismo. El lago negro en el que flotan emociones que carecen de nombre, las telas rotas de nuestras acciones inconclusas, las posibilidades irrealizadas. En ese punto aparecen las palabras que nos faltan en el día (…) Y es esa claridad exacerbada la que nos impide dormir, el convencimiento de que en cada parpadeo el universo se desplaza unos milímetros más y que en ese pliegue puede estar aquello que buscamos sin saber siquiera su nombre, sin tener la más remota idea de lo que es ni dónde buscarlo, pero sí la sensación de que nos falta.
Al primer libro de José Manuel Aguilera Estambul, Cuadernos nocturnos no se le puede definir con un género, limitar con una forma o explicar de manera sencilla. En esas páginas muy blancas leemos las palabras que el autor, desde la mesita de noche o en lo alto de un vuelo, ha decidido sacar de su mente, aquellas que no han encontrado su música en las canciones de La Barranca o en otro de los tantos proyectos en los que participa. La música, como él lo dice, es intangible, por lo que aunque la compres, la censures o las restrinjas es imposible de poseer. Las palabras, por otra parte, no flotan en el aire sino que se quedan guardadas, tatuadas en el cerebro o en la página y se puede volver a ellas siempre, incluso en el silencio o en la oscuridad.
De un espacio oscuro (como la noche) o místico (como Estambul), desde una apreciación subjetiva (tu noche y mi noche no son las mismas, igual que tu Estambul o mi Estambul) y muy cercano a la poesía, José Manuel habla del amor, de la música, la vida, la gente, Dios: de todas las ideas que durante el día no ocupan más de un segundo en nuestra mente pero que de noche pueden llevarnos a reflexiones interminables. La forma no es relevante: a veces parecen anécdotas, a veces poemas, otras, tweets. Lo cierto es que la brevedad de su contenido es tierra fértil para la imaginación, la reflexión y el deleite.
En ciertas noches es posible ver lo que quizás en otras vidas te tomaría años.
Las letras escritas por José Manuel Aguilera siempre se han distinguido por ser elaboradas, poéticas, con muchas referencias a la literatura y a otros personajes o instantes de la historia, el cine, la música. Leer Estambul (…) es como encontrar en la semilla en prosa de estas letras, de las ideas que tomaron otra forma. Aunque breve en su forma y extensión, el libro nos permite adentrarnos en una intimidad cálida, humorística, a veces hasta sarcástica. La verdad es que además de ser un excelente músico, José Manuel Aguilera ha acertado también en la palabra escrita, probando tener un talento que no sólo se limita a la guitarra.
Un solo se justifica si se toca como un animal en extinción.
Muy bien por este primer solo en papel, que cumple absolutamente su cometido. Espero que no sea el último libro de él que veamos publicado.
Ficha:
Estambul, cuadernos nocturnos
Autor: José Manuel Aguilera
Ilustraciones de Claudia Sánchez
Editorial Rhythm & Books
Colección: La letra con música entra
Comprar:
* Página oficial de La Barranca
* Gandhi
Ya lo encargue! Aproveche y me compre una playera.
Me gusta el tono del libro, muy intimo, como entrar y leer lo que hay en el fondo de su mente. Me gusto tu review.
Saludos!
¡Genial! Me dices luego qué te parece. Yo también me compré una playera, jaja de hecho la traigo puesta :D
Es muy interesante y halagador leer lo que provoca el trabajo de José Manuel Aguilera publicado por R&B. Yo también espero que no sea el único libro, y que más adelante alimente con otros textos la serie “La letra con ritmo entra”.
hola, me gustaria saber si ustedes saben donde podria comprar el libro ya lo busque en las librerias de mi ciudad y no lo tienen y lo cheque en la pagina oficial de la barranca y dice que esta agotado… ojala y me puedan ayudar muchas gracias
Hola! En Monterrey yo lo vi en la Casa del libro, no sé dónde más se pudiera conseguir, a lo mejor directamente en la editorial?