No me había dado cuenta del tiempo que ha pasado desde el último post que escribí. Supongo que he estado muy ocupada con cosas, perdiendo el tiempo en otros asuntos, saliendo al mundo real, procastinando en lugar de escribiendo una tesis, qué sé yo. Hoy que regresé a darme cuenta de que con la actualización del theme había perdido mis banners (ya los regresé y agregué otros) también noté que como quiera siguen cayendo visitas. Entonces empecé a leer los posts viejos que aparentemente están siendo visitados y vuelvo a tener la reflexión que ya he tenido en ocasiones posteriores. Y es que siento que antes era más libre al escribir en este blog. Más bien, antes me sentía más libre, más anónima. Había más comentarios, temas más o menos debatibles o polémicos, y no me daba tanto pendiente expresar libremente mi opinión. Ahora conozco a muchos de mis lectores, y cuando llego a pensar en cierto tema polémico, de la naturaleza que sea, me pongo a pensar si no ofenderé a tal o cual, o si Fulanito/a va a pensar que soy una pendeja, o una stalker, o le estoy aventando una pedrada. Al final termimo borrando todo lo que escribí, y me he descubierto haciéndolo más de una vez (muchas más veces de las que quisiera). Es todo este asunto de debatirse entre la fama y el anonimato, el meditar si equis foto se sube o no a facebook (y terminar apareciendo en 50 que subió tu amigo). Por ejemplo, este blog no está conectado a mi cuenta de facebook, no sé qué sentiría invitando a toda esa gente que me conoce a leerme. Es raro. Lo malo es que no puedo simplemente decir “borrón y cuenta nueva” y empezar un blog anónimo, porque tampoco es el caso. Vamos, que no tendría por qué tener necesidad de cambiar de foro, pero al mismo tiempo, es complicado ser abierta y compartida todo el tiempo. A final de cuentas, ¿qué es un blog? Esto dejó de ser un ejercicio literario hace mucho tiempo, pero también dejó de ser un diario personal. Se convirtió como en una revistita de variedades que por alguna razón sigue recibiendo visitas.
En fin, veré qué puedo hacer por este blog. Mientras tanto, agregué más gatitos. MOAR KITTIES. Esa siempre es la respuesta.
Me gustó este post :) Me pasa lo mismo a menor escala incluso en Facebook y Twitter. Hay cosas que en realidad quiero decir, pero que pueden ser interpretadas como una agresión hacia uno u otro lector/a. Por ejemplo, hoy quería decir que me molesta mucho que la gente que más insulta a quienes van a votar por x o y en la elección, y la gente que más anima a protestas/manifestaciones, ni siquiera está en el país ni van a votar de lejos. Pero aunque conozco a varias (>3) personas así, sospecho que si digo esto en FB o Twitter, al menos 1 de esas personas va a querer bloquearme, o peor, esto va a afectar severamente nuestra amistad. Claro, por otro lado, que tantas de mis opiniones tengo que compartir? Y por que debo compartir lo que pienso con el mundo? Y que tanto estoy dispuesta a “perder” por ello?
Del otro lado de la moneda, es fácil darse cuenta que tipo de contribuciones son más populares, reciben más likes y más comentarios. Y me pregunto qué tan consciente es la gente cuando escribe ciertos status updates (que por lo general suelen ser superfluas y simpaticas observaciones sobre la cultura pop) sobre qué tan bien recibidos serán. O sea, que tanto la anticipación a la reacción de lo que decimos nos censura o afecta nuestras palabras y tono.
Ahem. Sorry, mi comentario estuvo más largo que tu post. Se nota que también estoy procrastinando, no?
Yo creo que el ‘problema’ esta en el boom de las redes sociales, que dejaron atrás aquellos post en donde escribíamos mas libremente sobre lo que pensábamos (porque otros también lo hacían)y esto hacia que nos identificáramos mas como personas y no como usuarios. Disfrute muchisimos blogs porque eran como novelas en tiempo real, añoraba leer el proximo post para ver que le decia el papa, o como le iba a en la escuela o si lo dejaba la novia. Por momentos hasta me encariñaba. Pero ahora con los status todo eso se reduce a información, videos, grilla, y bullyng. Volvieron los usuarios se escondieron las personas. Quizas por el mismo temor a decir lo que en verdad piensan y como dices que se lo tomen personal cuando ni al caso.
Yo intente rescatar ese ejercicio que era muy liberador pero quien sabe por que también me dio pena y termine dejándolo privado para cuando sienta la necesidad. Intente también hacer un blog con otro lado de mi, mas espiritual, místico, new age, pero me paso lo mismo que a ti y si no borraba post completos me sentía muy alocada xD Mientras siga habiendo gatitos que viva el blog.
Gaby y Medulla, las dos tienen mucha razón.
Y por cierto, no me había puesto a pensar en los blogs de “antaño” (jaja ya voy a empezar a evidenciar mi edad) que tal cual, eran como novelas. Eso era padre, y en efecto, te encariñabas con la gente. Incluso siento que yo misma antes comentaba más, creo que hasta consejos daba. Y ahora hay cosas que digo: ¿esto pertenece al facebook o al blog? cuando no tendría por qué preguntarme esas cosas.
Hola Susana. Yo no escribo ningún blog y no soy muy afecta a las redes sociales pero es agradable leer lo que escribes. He visto películas y leído alguno de los libros que has recomendado aquí y bueno, también he dejado de ver lo que no es de mi interés. Para eso son los bolgs, para compartir. Ah, por cierto… para que te haces famosa eh? ahora aguántese jajajajaja
Saludos!!!