No ganaron mis gallos :(

Acabo de ver la primera semifinal del Eurovision y ya desde ahorita me siento decepcionada. Fueron 18 participantes de los que tenían que pasar 10; 4 de los 18 me parecieron muy buenos (“buenos” significando básicamente “algo los hizo atractivos para mi”) y sólo 1 de esos 4 pasó. Eso habla muy mal de los votantes, o muy mal de mí.
Lo que le agradezco mucho a este Eurovision es que pude conocer a Izabo, grupo del cual me hice fan de un día para otro. Es un grupo muy bueno, muy creativo, que mezcla rock, funk, sonidos orientales y un toque bastante retro. Este es el segundo video de la canción con la que participaron (y obviamente, ni a la final llegaron) y vale la pena verlo aunque sea por el trabajo visual. Y por ver Tel-Aviv :)

Al aire

Estoy a punto de salir rumbo a la estación de radio a transmitir mi programa. Acabo de terminar la selección musical y estoy muy satisfecha, contenta, felicísima. Y es que hoy me tomé una licencia (¿poética?) y en lugar de música gitana voy a tocar rock turco, jaja. Bueno, de una forma u otra por ahí va la cosa.
Lo que me emociona es lanzar canciones al viento. Suena cursi, ajá, pero cada que preparo la lista me pregunto si alguna vez tal o cual canción se habrá transmitido por radio antes en esta ciudad. Con la mayoría estoy segura de que no. Entonces selecciono mis canciones con mucho cuidado porque bueno, nunca se sabe, pero puede que en algún momento a alguien le ocurra topársela por casualidad y no sé, a lo mejor le gusta. Puede ser.

El eurovisión, otro de mis placeres culpables

Tengo ya varios años que no dejo de ver aunque sea la final del Eurovisión, más por curiosidad que por otra cosa (ajá). La verdad es que he descubierto dos o tres rolas o artistas que se han quedado conmigo al paso del tiempo, además que ver el programa es tener una pizquita de mundo en unas horitas. Los participantes de este año ya se están eligiendo, y de entre los videos que he visto hay uno que no me deja de dar vueltas en la cabeza, y es por el que definitivamente votaría si estuviera en mi poder votar. Ellos representarán a Israel, y es (hasta ahora) la única de las canciones concursantes que cuenta con video propio, que además está super divertido.

A lo mejor no suena nada a Israel pero tiene muchos puntos a favor. La canción es SUPER pegajosa, suena un poco retro, tiene los coros en hebreo (se critica mucho que ahora todo mundo resulta que canta en inglés), es divertida y no sé, yo estoy encantada. Admito que no he escuchado otras canciones del grupo, pero es que ahorita estoy tan feliz con esta.

Otra sorpresa que casi me saca la lagrimita de ternura, es la participación de Rusia… ellas son las Buranovskiye Babushki, y bueno, el video hay que verlo para creerlo, por lo menos el primer minuto. Hay que ver la cara de algunos jueces, de total incredulidad…

Obviamente la canción no me parece la mejor, pero el anacronismo es remarcable y claro, saca un poco (mucho) de onda. Pero es que son tan tiernas…
El Eurovisión no se reconoce precisamente por tener las mejores rolas, de hecho muchas son basura o presentaciones más bien ridículas o trabajos vocales muy “buenos” pero totalmente comunes y musicalmente iguales a otros muchos, y por lo tanto, aburridos. Y no me hagan hablar del eurodance. Yo aprecio los trabajos creativos, buenos musicalmente, originales, con la esencia del país que representan. Son estas cosas las que hacen el programa interesante, al menos para mí. Igual no me hagan mucho caso, tengo gustos musicales muy raros :)

Everything counts

De seguro ya lo vieron, pero si no, véanlo ahora ya mismo ya.
El video muestra a Dicken Schrader y sus dos hijos haciendo un maravilloso cover de Depeche Mode. Me ha enternecido casi hasta las lágrimas (ohhh esa marea emocional llamada hormonas femeninas) y casi hasta me dan ganas de tener hijos ya.

Ahí vienen los gitanos


Pues lo tenía muy guardadito, porque eran tantas mis ganas de que ocurriera, que si por alguna razón me negaban la propuesta con ya todo el mundo enterado, me hubiera sentido muy mal. Pero la cosa ha salido mejor de lo esperado, y me dieron la posibilidad de hacer mi “experimento” para ver que tal funciona. Así que depende de ustedes, sus llamadas y sus comentarios el que este programa prospere y no nos destierren :)
Sin más que agregar, los invito este sábado 18 de febrero a que escuchen mi nuevo programa Romanistán – Nación Gitana, a las 10 PM (UTC-6) en Frecuencia Tec, 94.9 FM. Si no tienen radio a la mano o están fuera de Monterrey MX, pueden escucharlo online en el portal de la estación. También pueden descargar el app gratuito, y escuchar ahí el programa.
Espero con gusto sus llamadas, comentarios y peticiones, a través del teléfono en cabina, en twitter o en nuestra página de facebook.

Voy en un coche

La primera computadora que llegó a casa lo hizo por ahí de 1993. Mi papá la conectó a internet (por teléfono, de qué otra manera), me sentó frente a ella, abrió algún buscador (yahoo?) y me dijo “busca lo que quieras”.
Yo escribí “salvador dali”. Esa fue mi primera consulta del mundo mundial.
Poco tiempo después llegó nuestra Aptiva, y llegó para quedarse. Entonces la usé para hacer tareas de mecanografía con copy-paste, jugar al Endorfun (el cual todavía echo de menos) y otros juegos didácticos, ah, y mi hobbie favorito de toda la secundiaria: coleccionar letras de canciones. Daniela y yo teníamos libretas dedicadas completamente a este propósito, divididas las canciones por idioma o género. Mis primeros intentos por traducir “What’s up?” se registraron en una de esas libretas.
Llegado el internet, todo fue más fácil (o más aburrido): ya no había que copiarlas de la revista Eres o escucharlas con los audífonos a alto volumen: stop, rew, play, pause, play, stop, rew, play, etc. La primeritititita letra que busqué e imprimí en internet fue la de esta canción.
Enjoy the flashback.