Pues nada, que esta fue (snif) mi semana de vacaciones, y ya mañana (SÁBADO, SÍ) regreso al trabajo. Una mugre de tiempo, nada, se me fue volando. Y todo porque la ocurrente de yo dijo “aprovechemos estas vacaciones para pintar el cuarto!! y acomodar los libros!! y el escritorio, y el closet, y la ropa de los ganchos, y la cajonera, y los papeles, PERO QUÉ BUENA IDEA!!!”. ught. Ya me daban las doce, y la una y las dos y las tres, y el trabajo nada que se acabó. Desgraciadamente no tengo fotos del “antes y después” del cuarto, me hubiera gustado, pero sí tengo una foto de las montañas de libros y discos que tuve que organizar. Que pondré después porque la tengo todavía en el celu, jaja.
No pondré fotos de todo el cuarto, porque hay otras cosas que todavía no toman su lugar… pero en general me está gustando cómo se ve, desgraciadamente no terminaré todo como pensaba. Hoy es mi último día, y no me tomé ni siquiera un rato para ver tele o descansar :( En fin, así es esto de ser asalariado de tiempo completo.
Y es que está super grave mi obsesividad por el orden. Las cajas, los tupperware y las bolsas ziploc me hacen feliz. Jijiji. Es raro.