Hoy desperté con la llegada de mis chácharas de Istanbul. Fui feliz, feliz. Me encanta el correo tradicional, y más aún, cuando traen regalitos adentro. Me gusta cuando el remitente escribe la dirección a mano, ver la letra. En este caso, la chica tenía una letra linda (parecida a la mía) y el sobre tenía un timbre de Turquía, y algunas cosas en turco. Bien chido :)
Todos los dijes son tan lindos como se veían en la foto, y ya traigo colgada mi manita de Fátima (o Hamsa).
Luego en la tarde, fui a mi fabulantástico ensayo de la obra de teatro (muero por contarles, pero todavía no), y luego a chacharear más. Como yo estaba de necia que quería colgarme el derbake, gracias al video de Carmine Guida, anduvimos buscando un talí (o como se escriba) que era lo que necesitaba. Encontramos uno que le quedaba bien a mi derbake, y llegandito a la casa nos pusimos a hacer el experimento, que nos salió aún mejor de lo que te muestran en el video (porque no usamos el cordoncito). He aquí el resultado:
Ándale zombigamer, intenta hacer lo mismo con tu cajón flamenco =P~
Pero en la búsqueda del talí ocomoseescriba, se me atravesó una tienda de calcetas y pos… calcetas.
Zaz, nueve pares de calcetas. Lo bueno: cada par costó menos de 10 pesos. Yo le doy mi dinero a los coreanos, ja. El de los cocodrilitos lo compré porque me acordé de un poema de la infancia… seguramente venía en alguno de esos libros de lectura de la sep (que yo me acababa en la primer semana de clases, y me daba una hueva enorrrrme que la maestra nos encargaba UNA lectura de tarea… y yo, chale, pos si a mí ya se me acabaron…), bueno, les decía que me recuerda a ese poemita de García Lorca… la neta de niña no le entendía… y ahorita tampoco, jajaja pero helo aquí:
El lagarto está llorando
(Federico García Lorca)
El lagarto está llorando.
La lagarta está llorando.
El lagarto y la lagarta
con delantaritos blancos.
Han perdido sin querer
su anillo de desposados.
¡Ay, su anillito de plomo,
ay, su anillito plomado!
Un cielo grande y sin gente
monta en su globo a los pájaros.
El sol, capitán redondo,
lleva un chaleco de raso.
¡Miradlos qué viejos son!
¡Qué viejos son los lagartos!
¡Ay cómo lloran y lloran.
¡ay! ¡ay!, cómo están llorando!
Y bueno, luego de las calcetas de lagarto y de la felicidad post compra de chácharas (aretes y diademitas y pendejaditas incluídas) nos echamos un cafecín con gordita de azúcar por veinte pesitos. Felicidad redonda y completa.
No les puedo explicar la felicidad que me brindan las chácharas. Hasta la palabra me gusta. Chá-cha-ras.
Pero Chacharalandia, la meca de las chácharas, tiene que ser Istanbul. Definitivamente.
Quiero volver ):
AYY, el poema del lagartoooo !!! Eres la onda Magenta !
Ayyy! yo quiero unas calcetas como las de la gatita rosa!!!
dónde las conseguiste???
saluditos, me gusta tu blo. :)
Gracias, Niobe, Abigail!
Las calcetas las conseguí en un localito que está en Juan Ignacio Ramón, por ahí por los puesteros. Tenían de muchas!!
Hola, donde comrpaste tus calcetas, están super padres y en mi ciudad no encuentro donde las vendan, gracias de antemano! saludos :)
Hola Bety, pues las compré en el centro de la ciudad, con los puesteros… hace mucho tiempo, pero de seguro ahí siguen. A lo mejor en tu ciudad también hay :)